Un nuevo destino, así denominó Camilo Andrés Salamanca su experiencia en México.

Camilo Andrés Salamanca, estudiante de noveno semestre de Administración de Empresas, viajó a México en agosto de 2016 a realizar un semestre de intercambio académico en el Centro Universitario Enrique Díaz de León; considera ser un estudiante afortunado, pues esta experiencia internacional le permitió emprender sus mayores deseos: viajar. Por lo tanto, agradece a la Universitaria Agustiniana y a la Oficina de Relaciones Internacionales ORI, por haberle permitido tener esta experiencia de tan alto nivel.

Cuenta Camilo Andrés, que para estar en México fueron varios los sacrificios y las dudas que por sí mismo afrontó, la duda y la incertidumbre no le permitían dar el siguiente paso para confirmar esta nueva experiencia, sin embargo, cuando notó el respaldo de la Universitaria en este proceso, se armó de valor y asumió cada uno de los sacrificios que traía consigo este intercambio.

“Escogí México como país para vivir esta aventura, y al vivir esta experiencia puedo decir que fue una muy buena elección, a su vez, haber escogido a Guadalajara como ciudad para alojarme en el tiempo de estadía en el país”, cuenta Camilo Andrés, adicionando que admiró y disfrutó cada instante allí, pues piensa que la riqueza cultural que hay en México es espectacular.

Al llegar al Centro Universitario Enrique Díaz de León, recibió una excelente atención, por esto agradece a la Institución desde lo más profundo de su corazón, “puedo hablar muchas cosas de la institución y todas son positivas, pero me quiero detener en que me sentí en un espacio agradable para aprender y apasionarme más por mi carrera. Adicionalmente, quiero tener en cuenta que la distancia me hizo apreciar y valorar el proceso académico que llevo a cabo en mi país”, expresa Camilo Andrés.

En el transcurso de su intercambio, alimentó su alma, disfrutó de fortalecer día a día su carrera profesional y vivió momentos inolvidables. “Regresé a mi país con la mochila llena de experiencias y nuevas sensaciones, pero lo más importante, con los mejores deseos de disfrutar mis últimos semestres en la Universitaria Agustiniana en mi programa de Administración de Empresas”.

Por último, piensa que no hay forma de agradecer lo vivido y hace una invitación a todos los estudiantes a dar provecho y valorar el lugar en el que se encuentran, considera que no solo él es afortunado, sino que también, cualquiera que decida preparar su mochila, y como él, decida cargarla de nuevas sensaciones y emociones.